Cuando vamos a comprar tapetes antifatiga, siempre pensamos en diferentes factores, como la durabilidad, materiales, propiedades, las oportunidades que ofrece, y cómo puede beneficiar el espacio laboral. De hecho, tenemos varios artículos sobre estos temas.
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No obstante, hoy es el turno de dedicarnos exhaustivamente a la estética, porque si bien están pensadas con fines ergonómicos, las alfombras antifatiga también pueden ser llamativas y una añadidura para la decoración del espacio de estudio o trabajo.
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En este sentido, el color negro será tu mejor aliado, y en este artículo te contaremos por qué.
¿Alfombras claras u oscuras?
Elegir el tapete antifatiga despierta un debate interno respecto al color que incluiremos en este espacio. Si bien los colores pasteles o claros son bonitos, se ensucian con más facilidad, y requieren cierto compromiso de aseo.
La limpieza es más exhaustiva, por lo que toma más tiempo, algo que debes considerar si piensas comprar una alfombra en estas tonalidades. Es muy diferente una alfombra que utilizaremos para adornar una sala, que un tapete antifatiga que será utilizado en un ambiente laboral, que por lo general suele ser concurrido.
Las personas caminan de un lugar a otro, y necesitan poder hacerlo con libertad, sin pensar que la suciedad de la alfombra será notoria. Con un tapete antifatiga negro, las manchas serán imperceptibles, sumándole que en general este tipo de superficies suelen ser fabricadas en base a materiales que no se manchan con facilidad.
Sin embargo, ten cuidado. En una habitación con tonalidades oscuras, lo mejor será optar por un tapete claro, para dar sensación de amplitud. En cambio, en espacios de coworking, es ideal comprar alfombras negras que delimiten las áreas de trabajo y aporten calidez al entorno.
Los tapetes antifatiga negros son un acierto seguro, y deberías incluirlos en tus espacios.
¿Por qué el color negro?
Es un color que agrega presencia, elegancia y personalidad, y que además es atemporal, por lo que sin importar las tendencias, siempre estarás a la vanguardia. No podemos olvidar que, combina a la perfección con el resto de elementos en una habitación, y nunca te dejará mal.
Sin embargo, no se recomienda su uso para las paredes, por lo que es ideal incluirlo en detalles pequeños, como los tapetes antifatiga en estas tonalidades. Nunca abuses de este color, y distribúyelo de manera estratégica e innovadora.
¿Cómo limpiar los tapetes antifatiga negros?
Si bien este tipo de alfombras antifatiga se ensucian con menos frecuencia, y su cuidado es relativamente más cómodo y práctico que el de los tapetes en tonalidades claras, debemos seguir los protocolos adecuados para su mantenimiento a lo largo del tiempo.
En la ficha técnica del producto podrás encontrar los materiales de fabricación, sus propiedades, e incluso los cuidados básicos que debes manejar. Evita a toda costa los productos de limpieza abrasivos que pueden desteñir la alfombra.
De esta manera, mantendrás la estética y ergonomía en tu lugar de trabajo. No cabe dudas que se trata de una alfombra versátil que puedes incluir en el salón de tu hogar, y también en oficinas, bibliotecas, talleres, peluquerías, y demás espacios, para reducir la fatiga, y promover un entorno agradable y seguro.
¿Necesitas un tapete antifatiga negro? Contáctanos.