Tapete antifatiga en rollo

Una alfombra antifatiga es la mejor forma de cambiar el suelo de nuestro espacio de trabajo, por una superficie blanda y segura, sin tener que remover como tal el material del piso. Esto a su vez, protege las baldosas o cemento, de manchas, moho, y otros agentes externos que pueden deteriorar la imagen del lugar.

En ocasiones, se compran tapetes individuales para oficinas particulares o para home office, no obstante, para espacios amplios o colaborativos, resulta más económico y rentable optar por aquellos en forma de rollo, que pueden cubrir varios metros cuadrado por completo.

Esto hará que cada rincón del área de trabajo sea ergonómico y seguro, lo que le sumará puntos a tu empresa en cuanto a seguridad laboral.

¿Cómo elegir tapetes antifatiga en rollo?

No deben ser muy delgados

El grosor de las alfombras es indispensable, si es demasiado fina, prácticamente no estaremos logrando mayor cosa. Y, por el contrario, si elegimos un tapete muy grueso, podría convertirse en un arma de doble filo. La opción ideal es aquella que unifica tus necesidades, logrado un punto medio en cuanto al espesor de la misma.

Acorde a tus necesidades

Los tapetes antifatiga en rollo, los encontramos en variedad de tamaños. Esto es porque se acoplan a cada tipo de necesidad. Si tienes un espacio pequeño, tal vez deberías preferir una alfombra antifatiga individual. En cambio, si te mueves de un lado a otro en tu casa, o te desarrollas en un espacio coworking, definitivamente necesitas esta superficie en tu vida.

Antibacteriano

Al ser utilizados en zonas masivas, y tomando en cuenta la situación de salud global, los tapetes antifatiga para espacios amplios deberían tener superficies antibacterianas, que además de proteger tu salud, resultan muy fáciles de limpiar y mantener. Esto lo especifica la ficha técnica que debes revisar minuciosamente.

¿Para qué sirven?

Los tapetes antifatiga en rollo, no solo te brindarán confort y seguridad en el espacio de trabajo, también mejorarán tu dinámica global. Podrás sentirte a gusto en todo momento, y tus pies no se cansarán de manera excesiva.

En este sentido, el trabajo de las alfombras antifatiga es evitar la contracción de los músculos. Cuando permanecemos mucho de pie o sentados, el tren inferior se mantiene estático, y con el paso de las horas la sangre se detiene, lo cual provoca malestar.

Con los tapetes se logra la contracción y expansión eficaz, lo que asegura una correcta irrigación sanguínea. Esto se traduce como el aumento de la presión venosa de los miembros inferiores, y un dote extra de energía para el resto del cuerpo, que puede ser empleada para otras tareas.

También son ideales para mejorar la estética del espacio, en caso de que el suelo original se encuentre deteriorado a nivel estético.
Y no podemos olvidar que es una excelente manera de promover un ambiente laboral agradable, donde los trabajadores se sientan valorados y seguros.

La seguridad de los trabajadores siempre será lo primordial. Invierte en ello.

¿Necesitas una alfombra antifatiga en rollo para tus espacios coworking? Contáctanos.